En Salinas Victoria, el pequeño Santiago, a pesar de enfrentar un trastorno motriz, vivió un emocionante día al convertirse en Guardia Honorario de la Guardia Nacional.
Ataviado con el uniforme militar y llegando en silla de ruedas al Campo Militar, el niño de 4 años recibió una medalla y un reconocimiento que simbolizan su sueño de formar parte de las fuerzas armadas.
Su madre, Lizbeth Villarreal, destacó que el entusiasmo de Santiago se hizo evidente desde que tuvo el uniforme en sus manos, y el evento incluyó una ceremonia de presentación ante los elementos de la Guardia Nacional, donde el niño hizo pase de lista y se le mostró el protocolo de saludo.
A pesar de su corta edad, Santiago exploró con admiración los módulos de exhibición del grupo antimotines, vehículos y binomios caninos de la institución, dejando una experiencia inolvidable que resalta su fortaleza y determinación.